La historia del Monte Nakano Momiji comenzó en 1802 cuando el gobernante Hirosaki Tsugaru Yasuchika envió más de cien tipos diferentes de arce a Kuroishi para ser reubicados.
La región es conocida como una famosa zona de follaje otoñal, por lo que muchas personas, tanto de la prefectura como de lugares lejanos, vienen a visitarla cada año.
El Santuario Nakano se encuentra dentro del área forestal, esta área también es conocida como uno de los tres lugares en Tsugaru donde se adora a la deidad Fudo.
Además de los arces de 200 años, el Santuario Nakano también tiene un cedro de 600 años y abetos y pinos de 200 años. Todos ellos han sido designados como Monumentos Naturales de la ciudad de Kuroishi. El cedro grande, en particular, se considera uno de los árboles más importantes de la zona de Tsugaru.
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